En nuestra nueva sociedad ya es una realidad la mezcla de etnias y culturas. Es algo que enriquece y dota a la raza humana de una gran belleza y variedad. De hecho, la variedad es enorme. Por una parte se dan casos de pieles extremadamente blancas y por otra, pieles oscuras y pieles negras. Estas no siempre son pieles de origen africano. Pueden ser una mezcla cuyo factor dominante es la pigmentación oscura.

Biológicamente hablando, la piel, tanto blanca como negra u oscura es igual. La epidermis y la hipodermis o capas más profundas, son idénticas. De hecho tienen los mismos componentes que todas las demás razas. La gran diferencia de las pieles negras o muy oscuras se encuentra precisamente en el color. Es algo que no obedece a una mayor cantidad de melanocitos. Ciertamente la cantidad de melanocitos es igual para todas las razas, pero en la raza negra o pieles muy oscuras esos melanocitos tienen una gran actividad. Producen mucha melanina o melanosomas de forma permanente. Incluso sin la estimulación solar. Eso no ocurre así en las pieles blancas.

Otra diferencia notable es que las pieles negras contienen un mayor número de capas de células. Y estas tienen un porcentaje de lípidos sensiblemente mayor que la piel de raza blanca. La piel negra presenta un aspecto más compacto precisamente por ese motivo.

El hecho de que la piel negra sea mucho más compacta hace que se forme una especie de barrera. Esto produce una menor absorción percutánea y un bloqueo a los productos cosméticos. Además, las pieles negras o muy oscuras son particularmente sensibles a los productos grasos que puedan inducir a la aparición de acné.  Es precisamente porque son pieles que producen una mayor secreción sebácea. Esto es bueno, porque resultan ser pieles con menor tendencia a envejecer; sin embargo las pieles étnicas producen mucho acné o pequeños barritos que taponan los poros.

Otra cosa que se ha comprobado, es que las pieles negras o muy oscuras están más expuestas a la aparición de queloides que los individuos de piel blanca.

Hay más factores diferenciadores que generan una necesidad de cosméticos para pieles negras o canela. Por ejemplo,  el hecho de que contienen un mayor número de glándulas sudoríparas. Algo que produce más pérdida de agua transepidérmica y por tanto una mayor deshidratación. Como consecuencia a eso, se produce una descamación. Además del típico color blanquecino de la superficie de las pieles negras que apaga el brillo y la hermosura de su color. La piel negra tiene 2,5 veces más tendencia a la descamación que la piel clara.

Las pieles negras tienen una mayor resistencia a los dañinos rayos solares y por lo tanto a las quemaduras; pero como contrapartida reaccionan produciendo una hiperpigmentación. En algunos casos exagerada. Ello se traduce en acumulaciones localizadas de melanocitos en forma de lunares o feas manchas (melasma). También son pieles en las que se da con mayor frecuencia el vitíligo.

En muchos casos presentan un tono desigual, ya que tiende a ser más oscura en ciertas áreas que en otras, por ejemplo: contorno de la boca o de los ojos, la frente o el cuello, tiene una mayor tendencia a tener problemas de pigmentación

Aunque la piel negra es una de las más fuertes y resistentes, también presenta ciertas características que la diferencian de otros tipos de piel y la hacen más vulnerables a productos fuertes.

Para cuidar de tu piel y prevenir las manchas, los brotes de acné y la deshidratación de la dermis, te compartimos cuáles son los cuidados que debes tomar en cuenta y la rutina de belleza ideal para tu tono y tipo de piel.

¡Repasemos!

Se deshidratan con facilidad

La piel negra, ciertamente, tiene una tendencia grasa y una capa cornea más gruesa que la hace resistente pero, a pesar de ello, tiene una función barrera menos eficaz por lo que se deshidrata con facilidad. Esto puede provocar que la piel se escame, esté seca, rugosa e incluso tenga apariencia de cocodrilo en algunas zonas del cuerpo, en especial durante el invierno ya que no toleran bien el frío.

En un clima templado, también puede desequilibrarse el nivel de hidratación dérmica porque transpiran poco.

Son sensibles a productos Fuertes

Con frecuencia, las pieles negras se irritan debido a las condiciones climáticas y a la utilización de productos agresivos durante largo tiempo. Esta sensibilidad produce inflamaciones superficiales que, a su vez, dan lugar a hiperpigmentaciones.

A pesar de ser más gruesas y compactas, las pieles negras también son sensibles a productos agresivos e irritantes.

Presentan alteraciones de pigmentación

Las células que producen la melanina en este tono de piel son más reactivas a las distintas lesiones de la piel, por esta razón, la piel negra es más propensa a la despigmentacion o hiperpigmentacion sobretodo en el contorno de los ojos y las comisuras de la boca.

Dificultad para cicatrizar

En las pieles oscuras como la morena y la negra, es más frecuente tener problemas de cicatrización tipo queloides, debido principalmente por el crecimiento exagerado de tejido cicatrizante a causa de lesiones en la piel, como por ejemplo, granitos, heridas, cortes o raspaduras.

Son propensas a brotes de acné

Los brotes de acné o espinillas es uno de los problemas más comunes de las pieles negras. Dada su condición grasa, los poros se obstruyen con facilidad y producen brotes de acné en muchos casos.

Al contar con un elevado número de glándulas sebáceas, las pieles negras son mucho más propensas al acné.

¡Consejos básicos para tu tez oscura!

Todos los tonos y tipos de piel necesita de cuidados que cubran sus necesidades, y la piel negra u oscura no es la excepción. Aunque la piel oscura tiene la misma composición que las demás pieles, ésta suele ser más compacta y resistente al sol, pero también es más sensible a los productos oleosos, y se deshidratan con más facilidad.

Al ser propensa a las pigmentaciones oscuras y tener una tendencia grasa, la piel negra requiere de ciertos cuidados particulares para que se conserve sana, hidratada un con un tono uniforme.

1. Limpia tu rostro correctamente

La piel oscura aunque es más gruesa que la piel clara, no está protegida de los contaminantes, sobretodo porque en la superficie suelen alojarse más contaminantes y radicales libres.

Para que tu piel se mantenga limpia y sin exceso de brillo, lava tu rostro cuidadosamente, tanto de día como de noche, e incluye tónicos florales en tu rutina de cuidado para proteger y restaurar su pH.

Evita utilizar productos desmaquillantes oleosos y opta por aquellos a base de agua como el agua micelar, las pieles oscuras producen mayor cantidad de sebo y los limpiadores cremosos pueden estimular su producción.

Una vez retires el maquillaje, puedes proceder a lavar tu rostro para eliminar las impurezas acumuladas en los poros.

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2. Hidrata tu piel a diario

Todas las pieles necesitan hidratarse, pero la piel negra deshidratada lo necesita aún más. Para asegurarte de que tu piel esté perfectamente hidratada y con un mayor nivel de grasa, debes utilizar productos como cremas o mascarillas para humectar tanto tu cutis como la piel de tu cuerpo.

Evita los productos ricos en aceites y, en su lugar, opta por cremas hidratantes con activos como el ácido hialurónico, que aporta hidratación sin dejar una sensación grasa en la piel.

3. Exfolia con regularidad

Para nadie es un secreto que las pieles oscuras son propensas al acné, si es tu caso, es importante que exfolies tu rostro y piel del resto del cuerpo con regularidad para evitar que las impurezas se acumulen y se formen granos y espinillas.

4. Protégela de sol siempre

Las pieles negras tienen una protección natural ante los rayos UV, sin embargo, esto no significa que no deban usar protector solar.

Cuando los rayos UV llegan a la piel, ésta produce más melanina para protegerse y propicia la aparición de manchas más oscuras y empeora las ya existentes. Además, favorece la hiperpigmentación en ciertas áreas.

Protege tu piel del sol usando protector solar siempre que te expongas al sol,  de esta forma podrás prevenir la decoloración de la piel, el fotoenvejecimiento y el cáncer de piel. La protección solar debe ser diaria, incluso cuando no estás en la playa

5. Ten cuidado con el acné

La piel negra suele ser de tipo grasa, por lo que uno de los problemas a los que se enfrentan muchas personas es el exceso de sebo en el rostro. Además de verse poco atractivo, la grasa y el brillo son los responsables de la aparición de granos o acné.

En este caso, te recomendamos visitar a un profesional para que te indique el tratamiento más adecuado a las necesidades de la piel oscura.

6. Usa productos para cuidar las manchas y las cicatrices

Si sufres de manchas y cicatrices en tu piel o rostro, es importante que las cuides para evitar que empeoren y logres atenuar su apariencia. Para ello puedes utilizar productos especiales que contribuyan con la regeneración natural de la piel y ayuden a disimularlas.No deben ser despigmentantes químicos. Se elegirán los menos irritantes.

Un truco de belleza natural y económico que puedes probar es aplicar una mascarilla de áloe vera. La sábila o áloe vera contiene propiedades que regeneran la piel y mejoran visiblemente las cicatrices. Si aplicas el gel extraído de esta planta todos los días sobre tu piel, ésta estará protegida y mucho más suave.

Para recuperar la belleza natural de tu piel es importante que apliques productos con propiedades regenerativas.

7. Cuidado corporal

Resulta imprescindible la aplicación de cremas muy nutritivas e hidratantes, que reblandezcan y suavicen una piel especialmente seca. Ingredientes como la manteca de karité y la vitamina E resultan muy adecuados para esta función.

Aquí te compartimos una receta que nunca falla:

Ingredientes:

• 2 Cucharadas de Gel de áloe vera

• 7/8 gotitas de aceite de jojoba

• % de Conservante que sugiere la ficha del producto que utilices

En un recipiente vacía dos cucharadas de gel de aloe vera. Agrega las gotitas de aceite de jojoba. Mezcla todo por 2 o 3 minutos. Envasar.

Tienes una crema 100% natural.

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