El acné es una patología genética y hormonal, para muchos es un problema que se prolonga hasta la edad adulta. Para complicar las cosas, no todos los tipos de granos son iguales y no todos requieren el mismo tratamiento, por ejemplo los brotes de acné quístico, es la forma más grave del acné que incluye granos profundos, blandos, rojos e hinchados. Dado que las lesiones están muy inflamadas, el tratamiento para el acné quístico tarda tiempo en funcionar. Puede que si visitas al médico te recete antibióticos para erradicar la bacteria responsable de la inflamación en el acné quístico.
En los casos más graves, el médico recetará una medicación más fuerte para evitar que la piel siga produciendo un exceso de sebo, dejándola más seca y menos propensa a formar granos. Ambos métodos tardan en hacer efecto, pero el aspecto de tu piel podría empezar a mejorar en aproximadamente un mes.
Quienes padecen de acné sueñan con una cura milagrosa pero lamentablemente sabemos que no existen dichas curas y los tratamientos para el acné pueden tardar semanas o meses en hacer efecto, no es solo cuestión de días ni tampoco de la noche a la mañana.
Aquellos que todavía tienen la piel con acné saben que es una batalla continua no solo tratar las imperfecciones que ya están en el rostro, sino también evitar que vuelvan a aparecer, ya sea con medicamentos orales recetados por el médico o tratamientos tópicos. ¡Pero nunca pierdas la esperanza! Los productos de cuidado tópico adecuados pueden tratar el acné de manera eficaz si se utilizan con regularidad.
A veces, lo mejor que se puede hacer cuando se combate el acné es volver a lo básico o volverse natural asique en este artículo dejaré algunos consejos sobre alternativas naturales que puedes implementar en casa.
¿Cuál es el mejor tratamiento para tratar el acné?
Si lo que queremos es hacer desaparecer el acné debes empezar por una limpieza adecuada. Te sugiero cualquier producto que limpie la piel con suavidad, elimine el exceso de sebo y de células muertas sin dañar la barrera protectora de la piel.
Con la piel limpia, el siguiente paso es aplicar un tratamiento eficaz para el acné. Algunas soluciones cosméticas incluyen ingredientes activos que liberan los poros, calman la inflamación y matan las bacterias causantes de los granos, al mismo tiempo que equilibran las bacterias beneficiosas de la piel.
Pero si ya elaboras tu propia cosmética natural podremos lograr todo eso que mencioné y mucho más porque sin duda trataremos la piel con productos mucho más amigables. Utilizando esté último método puedes incluir ingredientes en tus fórmulas que sepas que van a aportar estos beneficios a tu piel para perfeccionar tu rutina diaria de belleza. Y si aún no has experimentado hacer tus productos te cuento que muy pronto podrás inscribirte en nuestro nuevo curso online de “Cosmética a tu manera”, donde allí podrás aprender a hacer toda la línea de cosméticos que necesitas para el cuidado de la piel. Cuando finallices de leer el artículo puedes anotarte en la lista de espera haciendo clic aquí https://aprende.ecosmetica.online/cursos/cosmetica-natural/ y pronto recibirás noticias de la apertura de inscripciones. 💪
¿Qué podemos hacer con ingredientes naturales que tenemos en casa?
Bicarbonato de sodio
Técnicamente, el bicarbonato de sodio y el agua ablandan los puntos negros y los poros obstruidos de la piel. Este ingrediente, que suele conseguirse facilmente en la farmacia, es mejor para la piel congestionada, ya que este tipo de piel es la más propensa a las obstrucciones de los poros. Te sugiero una mascarilla casera de bicarbonato de sodio diluido en agua desmineralizada, dejar actuar durante 10 minutos y luego de enjuagar el rostro con agua fresca del grifo aplicar la crema hidratante.
El bicarbonato de sodio también puede funcionar para neutralizar el nivel de pH de tu piel. Esto es importante porque, si tu pH está desequilibrado, puede volverse propenso a brotes de acné, sequedad y otras irritaciones de la piel.
Vinagre de sidra de manzana
Es el mejor astringente de la naturaleza porque ayuda a equilibrar el pH de la piel, dejandola menos grasa y menos seca. Pero atención, debido a que el vinagre de sidra de manzana es muy corrosivo, debes diluirlo antes de usarlo. Te sugiero utilizar una mezcla de una parte de vinagre por 3 partes de agua desmineralizada. Aplícala en tu rostro con un algodón o un rociador. No es necesario que te laves y puedes usar esté tónico al menos 4 veces por semana mas o menos.
Cúrcuma
La cúrcuma está repleta de antioxidantes que brindan muchos beneficios para la piel. Su ingrediente activo, la curcumina, es lo que le da un tinte amarillo anaranjado; también es lo que la convierte en un antiinflamatorio tan potente. Además de tratar el acné, la cúrcuma también puede aliviar la hiperpigmentación.
También tiene una propiedad antibacteriana que hace que la cúrcuma sea excelente para tratar el eczema y la psoriasis, en cuanto al acné, ayuda a reducir los brotes.
Te sugiero mezclar la cúrcuma con bases exfoliantes suaves como arcilla caolín, harina de avena o de arroz y la coloques en tu rostro como cualquier otra mascarilla.
Miel
La miel es un remedio natural muy conocido por sus propiedades antibacterianas y humectantes. Pero quizás lo que se reconoce menos es que no toda la miel es igual: la miel de manuka, por ejemplo es una miel que producen las abejas melíferas que se alimentan de árboles de manuka en Nueva Zelanda, contiene la mayor actividad antimicrobiana y es excelente para tratar el acné, la inflamación y la piel, y como si fuera poco tiene colágeno, una sustancia muy demandada por la industria cosmética, además de un alto porcentaje de vitaminas y minerales. Esta miel es derivada de Leptospermum scoparium (árbol de té), es particularmente valorada por su actividad antibacteriana sin peróxidos (NPA, por sus siglas en inglés). Este agente antibacteriano se considera relativamente estable, ya que no es tan sensible al calor y la luz, por lo que es una opción viable para tratamientos médicos.
El componente antibacteriano más importante que tiene la miel de manuka es el metilglioxal (MGO), que aparece en un alto porcentaje, a diferencia de otras mieles que lo tienen en mínimas cantidades y dado que esta miel también actúa como un humectante atrapa la humedad en la piel una vez aplicada dejando la piel suave, hidratada y no grasa.
Te sugiero mezclar miel, aloe vera, una cucharadita de harina de avena y una pizca de cúrcuma para hacer una pasta. Extiende esta pasta en el rostro y, una vez que se enjuaga con agua fría, usa una mascarilla de gel frío durante 30 segundos para descongestionar aún más. Si no logras conseguir la miel de manuka puedes utilizar cualquier otra miel pura orgánica y será perfecta.
Sal marina
La sal de grano fino limpia profundamente, elimina las células muertas de la piel, equilibra la humedad y extrae las toxinas de los poros, lo que la hace especialmente excelente para prevenir el acné o para tratamientos rápidos durante los brotes en la cara y el cuerpo.
La forma más sencilla de utilizar la sal marina es mojarse la cara o el cuerpo, poner un poco de sal en la mano húmeda para que se quede pegada y luego dar golpecitos suaves sobre la piel. Puedes dejarla durante unos minutos o enjuagar inmediatamente. Sólo asegúrate de no frotar ya que es demasiado abrasiva de por sí.
Aceite esencial de árbol de té
El aceite de árbol de té es un gran agente antiséptico y antiinflamatorio, según los expertos. Es famoso por sus propiedades antibacterianas, antimicrobianas y antifúngicas, lo que lo convierte en un tratamiento local fácil y eficaz.
Por su naturaleza antiinflamatoria, reduce el enrojecimiento e hinchazón de la piel al mismo tiempo que minimiza los brotes de acné y reduce los hongos que causan la caspa.
Te sugiero diluir el aceite de árbol de té en una pizca de aceite de oliva virgen extra o aceite de jojoba y aplicarlo directamente sobre el granito de acné. Puedes conseguirlo en nuestra tienda online en Argentina haciendo clic aquí https://www.ecosmetica.net/productos/aceite-esencial-de-tea-tree/
Extracto glicólico de té verde
Los taninos presentes en el té verde, ayudan a eliminar el exceso de grasa en la piel, haciéndola lucir más tersa. Por sus propiedades antibacteriales y por su efecto desinflamatorio, es un excelente aliado en estos tratamientos.
Las sustancias que se encuentran en el té verde colaboran con la disminución de las bacterias que originan el acné y disminuye visiblemente la inflamación, a la vez que disminuye la resequedad, la picazón y las alergias por contacto.
- Aquí te dejo una idea para hacer en casa, mezcla en un bowl alguna leche vegetal que tengas, podría ser coco o almendras, le agregas unas gotitas de extracto glicólico de té verde y la colocas en el rostro con un pincel, deja que actúe 20 minutos y luego enjuaga suavemente e hidrata con tu crema habitual. Puedes cerrar el tratamiento con una mascarilla de gel frío durante 30 segundos para descongestionar la piel, si vives en un clima caluroso o es verano la mascarilla fría te dará mucho más placer.
Este ingrediente utilízalo como principio activo en tus cremas hidratantes y también puedes agregar unas gotitas en las mascarillas que te apliques. Consíguelo en nuestra tienda online de Argentina haciendo clic aquí https://www.ecosmetica.net/productos/extracto-glicolico-de-te-verde-100-ml/
Te comparto aquí debajo un testimonio de una alumna que realizó un tratamiento de acné con productos de cosmética natural y los resultados que ha obtenido fueron de mucha felicidad. Y uso la palabra felicidad porque sabemos que el acné no solo afecta a la piel de quien lo sufre, sino que también de una manera más profunda a nivel emocional. La confianza y el autoestima de las personas que sufren acné se ven deterioradas tanto si se sufre de adolescente, como en la edad adulta..
Si bien ella menciona una loción que aprendió a elaborar en nuestro curso online de cosmética a tu manera, te cuento que tú puedes utilizar estos mismos principios activos como el extracto de té que mencionamos en una mascarilla o en tu crema diaria.
Lo que te quiero demostrar con este ejemplo es que no es necesario que compres miles y miles de productos y te enloquezcas, sino que con tan solo ser constante y tener una rutina acorde de cuidados de la piel lograrás mejorar profundamente el aspecto.
Por otra parte intenta eliminar todos los productos lácteos (yogur, leche y todos los quesos) durante al menos tres semanas para ver si aparecen nuevos brotes. Si no aparecen es posible que estés conociendo algunos motivos del surgimiento de estos brotes y tendrás que revisar la alimentación.
Habla con tu médico acerca de los riesgos y beneficios de los medicamentos y de otros tratamientos que estés considerando implementar. También, programa citas de seguimiento con tu médico cada tres a seis meses hasta que tu piel mejore.
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